Nuestro equipo en China está presente durante todo el proceso de fabricación. Solo ejecutamos proyectos con personal propio. Somos sus ojos y oídos en Asia.
DETECCIÓN Y RESOLUCIÓN TEMPRANA DE PROBLEMAS
Nuestros procedimientos de inspección y pruebas en origen son la mejor manera de asegurar que los equipos adquiridos cumplen escrupulosamente con la especificación contratada, evitando desagradables sorpresas al recibirlos en destino. Muchas veces las desviaciones se detectan en el punto de instalación, pero normalmente los hitos de construcción de los proyectos imposibilitan corregir o sustituir los componentes, por los que se aceptan y se negocia una compensación económica posterior. El resultado final, indefectiblemente, impacta en el rendimiento del proyecto. Un control de calidad en origen permite una detección temprana de problemas que hará posible corregir las desviaciones con un impacto mínimo en el resultado final.
Nuestro equipo de ingenieros de calidad, dotados de las más modernas herramientas de reporte online, serán sus ojos y sus oídos en las fábricas asiáticas.
El 90% de los fallos en campo se pueden evitar en fábrica.
EQUIPOS LOCALES PROPIOS A LO LARGO DE TODA LA CADENA DE SUMINISTRO
La mayoría de los equipos fotovoltaicos y de baterías críticos se fabrican en Asia. Este hecho provoca que haya unas barreras geográficas, de lenguaje y culturales, en muchos casos insalvables.
Si a esta realidad le sumamos las restricciones de viaje producidas por el COVID19 se impone que los equipos de inspectores sean locales y fieles al cliente.
Por ese motivo solo realizamos inspecciones con personal propio, debidamente cualificado y conocedor tanto de las costumbres asiáticas como occidentales. ¡No podemos permitirnos quedar “lost in translation”!
